El pueblo saharaui, fue abandonado por el Gobierno español en el año 1975, coincidiendo con el final de la dictadura, alejamiento que se realizo bajo la promesa de Autodeterminación, mediante un referéndum que se ha ido aplazando indefinidamente. Consulta y autodeterminación que incluso ha sido aprobada por unanimidad en diferentes ocasiones por la propia Organización de Naciones Unidas, existiendo varias resoluciones Internacionales que amparan el derecho del pueblo saharaui. Sin embargo, sus territorios lleva 35 años ocupados por el ejercito y la seguridad Marroquí, sometiendo a toda su población a la condición de refugiados con una vida dependiente del Gobierno de Marruecos, quien impone de forma eficaz, sin ninguna intervención internacional, su presión y persecución contra quienes luchan activamente por el derecho de autodeterminación de este pueblo, amigo del pueblo español.
En los últimos días, ante la perplejidad del pueblo español y la ineptitud del Gobierno de España que permanece dando vaivenes amparando la situación. Marruecos, esta sometiendo por la vía de la represión militar y sus cuerpos de seguridad a miles de ciudadanos (refugiados) saharauis, incendiando y destruyendo su forma de vida en los territorios ocupados ilegalmente por Marruecos.
El Gobierno de España, tiene contraída una deuda histórica con el pueblo saharaui, que contiene la promesa de favorecer su autodeterminación y realizar la consulta necesaria para dotarle de viabilidad jurídica ante otros estados. Marruecos debe abandonar los territorios ocupados y permitir de inmediato que la Republica Árabe Sarahui Democrática se haga cargo de estos territorios.
La Organización de Naciones Unidas y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, deben intervenir de inmediato ante la masacre que el Reino de Marruecos está realizando contra el pueblo saharaui. El derecho internacional debe imponerse por encima de estos hechos y reponer al pueblo saharaui en el lugar y derechos que le fueron usurpados por el Reino de Marruecos.
